Te contamos qué flores plantar al sol, en semisombra o en espacios en sombra esta primavera.
Todos deberíamos rodearnos de flores en primavera. Sin excusas: jardines, terrazas, ventanas o un pequeño rinconcito dentro de casa. Esta estación nos ofrece infinitas posibilidades para llenar de color de nuestro hogar. Hay plantas para todos los gustos, para todos los espacios y… ¡para todas las personas, incluso las más despistadas!
¡Que no! ¡Que no queremos excusas! Las plantas y las flores son vida, belleza y alegría. Hemos recogido diferentes opciones en función a la ubicación y exposición de tu casa y te enseñamos a cuidarlas, para que encuentres la planta perfecta para ti. ¡A tope con la primavera!
PRIMAVERA: PLANTAS AL SOL
ALEGRÍA DE LA CASA (IMPATIENS WALLERIANA)
Esta es una de las opciones más populares de la primavera, gracias a su gran capacidad de floración, rápido crecimiento y resistencia. Es una planta tropical por lo que, teniendo eso en mente, sus cuidados son sencillos: necesita estar ubicada en un lugar luminoso, donde pueda recibir mucho sol (aunque también puede crecer en semisombra), sufre con el frío y le gusta tener siempre la tierra húmeda. Tu alegría de la casa agradecerá, además, un aporte de abono líquido que le ayude durante la floración. En cuanto a los riesgos que pueden asolar a esta planta debes tener mucho cuidado con los hongos y con la araña roja.
TAGETE (TAGETES ERECTA)
Una planta muy fácil de cuidar y con una flor muy atractiva que vestirá tu jardín o balcón. Tu tagete necesitará mucha luz solar. Si lo colocas a la sombra la planta crecerá en exceso pero con una floración menor y, además, las flores perderán la intensidad de sus colores. Riégala de manera moderada y recuerda que en primavera y en verano es mejor hacerlo siempre a primera y última hora del día. Elimina las flores marchitadas para que la planta no se agote y pueda seguir floreciendo. Las plagas más comunes que pueden dañar tu planta son la araña roja, la mosca blanca y las orugas.
DALIA (DAHLIA)
La dalia es un tubérculo de primavera con una preciosa flor de colores blancos, rojos, rosas, amarillos… La variedad de dalia que cultivamos en el jardín es una herbácea perenne con un ciclo anual: crecen en primavera, florecen entre la primavera y el verano, mueren al llegar al invierno y consiguen sobrevivir gracias a sus raíces tuberosas. En esta época del año puedes hacerte con tu dalia ya desarrollada o comprar el tubérculo y seguir todo el proceso de crecimiento desde el principio. Si haces esto es importante que sepas que los riegos deben iniciarse una vez que la planta haya empezado a brotar e incrementar el ritmo cuando tengamos los botones florales. Durante el crecimiento y la floración de tu dalia, riégala unas dos o tres veces por semana, siempre sin encharcar la planta. Colócala en un lugar soleado y vigila las babosas y los caracoles, que son las plagas más habituales. Para ayudarla en su crecimiento, te recomendamos abonarla con un fertilizante bajo en nitrógeno cada quince días durante la primavera y el verano.
DIPLADENIA (MANDEVILLA)
La dipladenia es una planta trepadora que te regalará unas preciosas flores de gran tamaño y con forma de trompeta en diferentes colores: rojo, rosa, amarillo… Colócala a pleno sol para que saque todo su potencial y puedas disfrutar de su abundante floración. A esta planta le gusta tener siempre el sustrato húmedo: riégala unas dos veces por semana, evitando encharcar la planta. En cuanto a los peligros, la dipladenia es sensible a la araña roja y a la cochinilla.
PRIMAVERA: PLANTAS EN SEMI SOMBRA
HORTENSIAS (HYDRANGEA)
Una de las plantas más populares de la primavera. ¡No es para menos! La belleza de sus flores la convierte en la auténtica protagonista del jardín. Lo ideal es situarla en una exposición de Norte o Este, donde reciba los rayos del sol parte del día pero no al mediodía, ya que esto quemaría tu planta. La hortensia te pedirá mucha agua: riégala en abundancia y en espacios cortos de tiempo, sin dejar que la tierra se seque entre riego y riego; y abónala durante la floración. Las principales plagas que pueden afectar a la hortensia son la araña roja, la cochinilla y los pulgones. Por cierto, ¿sabías que el color que vaya a tener la flor dependerá del pH del suelo en el que la plantas? Si es más ácido será de color azul, si la colocas en un suelo poco alcalino nacerá de color rosa y si la plantas en una tierra muy alcalina la flor será blanca.
Más sobre las hortensias:
– [Vídeo] Hortensias: consejos para su plantación y cuidados
– [Blog] Hortensias: aprende a cuidar las fores más populares de la primavera
CAMPÁNULA (CAMPANULA CARPATICA)
Una de las flores más tempranas de la primavera que llenarán tu jardín o tu balcón de color y alegría. Sus flores con forma de campana dan lugar a su nombre, aunque también se conoce a este planta como “Rapunzel” ya que, como la melena de la protagonista del cuento, los tallos verdes de la campánula crecen rápido y de forma abundante, trepando por cualquier superficie. Si tienes un lugar en tu balcón o jardín donde lleguen los rayos del sol por la mañana y el resto del día hay sombra, es el lugar idóneo para esta planta que te dará flor desde la primavera hasta el otoño. Riégala a demanda para que tenga siempre humedad en la tierra, retira las flores marchitas para restarle energía a la planta y vigila las caracolas y babosas.
AMAPOLA (PAPAVER)
Una de las flores más simbólicas de la primavera. La amapola te regalará una floración espectacular pero, eso sí, corta. Esta es una planta muy fácil de cuidar, se acomoda a cualquier tipo de suelo y necesita muy poca agua, el exceso de humedad es perjudicial para ella. Necesita el sol para lucir sus flores intensas, así que plántala en un lugar seco y bien drenado, en una zona de semi sombra. La flor de la amapola, que ha inspirado a pintores y poetas, muestra una silueta frágil que se eleva por encima del follaje al final de un tallo de 30 a 80 centímetros y tiene grandes y preciosos pétalos en tonos rojos, rosas, blancos… A tu amapola pueden atacarla los pulgones si crecen junto a plantas infectadas o, si el área de cultivo está muy húmeda, puede sufrir el ataque del oídio.
AZUCENA (LILIUM CANDIDUM)
Puedes ubicar esta planta en semi sombra pero teniendo en cuenta que necesitará más rato de luz que de sombra para florecer. De nuevo estamos ante una planta muy resistente y fácil de mantener que te regalará sus flores vistosas y grandes. Esta planta aportará verticalidad a tu jardín y es que la azucena, originaria de Siria y Palestina, desarrolla tallos verticales de hasta un metro de altura de los cuales brotan las hojas y las flores. No resiste a la sequía, pero tampoco al encharcamiento, por lo que antes de regar te aconsejamos comprobar la humedad de la tierra. Usa, a ser posible, agua de lluvia, sin demasiada cal. Y abona la planta cada quince días en primavera y en verano. La azucena es muy sensible a los pulgones.
PRIMAVERA: PLANTAS EN SOMBRA
AZALEA (AZALEA)
La azalea es una flor que originariamente estaba ubicada en lugares montañosos, por eso prefiere ambientes frescos y húmedos. Además, a esta planta no le gusta el sol directo. Es una planta que da trabajo, ya que necesita que la rieguen frecuentemente y de manera abundante, sobre todo cuando está en época de floración; pero merece la pena por disfrutar de su flor, que parece una trompeta y está agrupada en grandes racimos. Vigila la presencia de orugas o de la araña roja en tu azalea.
– [Vídeo] Azaleas: tipos y consejos para su cuidado
RODODENDRO (RHODODENDRON)
El rododendro es un arbusto versátil muy popular. Esta planta perenne disfruta de una espectacular floración y es muy sencilla de mantener. Sus flores crecen en ramilletes y son de larga duración. ¿Sabías que el rododendro es la segunda de las plantas de exterior más cultivadas en el mundo después de las rosas? ¡Casi nada! Más allá de las flores, el verde de sus hojas te acompañará siempre ya que estamos hablando de un arbusto perenne que puede llegar a alcanzar ¡tres metros de altura! Eso sí, paciencia: es de crecimiento lento. Simplemente ten cuidado con el sol (no tolera su incidencia directa) y riégalo frecuentemente en los meses de más calor, para que la tierra no se quede seca. Ojo con la araña roja, los pulgones y la cochinilla.
MAHONIA (MAHONIA AQUIFOLIUM)
Esta es una planta que siente predilección por los lugares sombríos y secos y que necesita, además, pocos cuidados para crecer. Necesitará un riego regular en pequeñas cantidades el primer año, pero después bastará con regarla si las temperaturas son muy altas o en periodos prolongados de sequía. La mahonia florece temprano: a finales de invierno o principios de primavera que te ofrecerá unas pequeñas y perfumadas flores amarillas que brotan de las profundas hojas perennes. Es una planta muy dura, que resiste a plagas y enfermedades; solo es peligroso el exceso de riego.
CAMELIA (CAMELLIA JAPONICA)
La camelia es una de las flores más bonitas de la naturaleza. Hay más de 80 especies diferentes de árboles y arbustos e infinitas variedades de flores, todas de gran belleza y tamaño. Las más sencillas tienen una corola de cinco pétalps, pero también las hay dobles y semidobles, con muchos más pétalos y más cerradas y que pueden confundirse con peonías o rosas. Esta planta empezará su floración en invierno y, si la cuidas correctamente, te durarán bien entrada la primavera. Durante el verano debes regarla de manera constante. Para favorecer su floración, añadiremos al agua de riego un abono específico para este tipo de plantas en primavera y otra en otoño. Las colocaremos a la sombra, protegidas del sol del verano y controlando que nunca se seque la tierra. Las plagas que pueden aparecer son la cochinilla o el pulgón.
PRIMAVERA: PLANTAS DE INTERIOR
ROSAL DE PITIMINÍ (ROSA X HYBRIDA)
El rosal mini o rosal de pitiminí es una variedad enana de rosal que podrás disfrutar en el interior de tu casa. Estas plantas tienen hojas similares a algunas variedades de jardín pero las flores son más pequeñas y reciben el hombre de pitiminí porque sus capullos están agrupados. El secreto para que crezcan en interior es darle un lugar con humedad ambiente alta y mucha luz, pero sn recibir la luz de sol. Riégala abundantemente y deja que se seque la capa superficial entre riegos. Además, es importante que añadas al agua un fertilizante en la época de floración de la planta. Ten cuidado con la araña roja, el pulgón y el oidio, porque son las plagas y enfermedades más comunes del rosal de pitiminí.
ESPATIFILO (SPATHIPHYLLUM)
El espatifilo, también conocido como lirio de la paz, es una de las pocas plantas de interior que florecer durante todo el año, aunque lo hace con más intensidad durante la primavera. Te invitamos a incorporar a tu hogar esta planta precisamente porque tendrás flor todo el año y también porque sus cuidados son muy sencillos. Puedes colocarla en un lugar sombrío, aunque si disfruta de luz crecerá más rápido y florecerá mejor. En cuanto al riego, en función al calor que haga en tu casa en verano deberás regalar dos veces por semana. Como siempre os decimos, la mejor manera de saber si una planta necesita agua es comprobar la tierra. Durante la primavera te recomendamos fortalecer tu espatifilo con un fertilizante alto en potasio. En cuanto a los peligros, vigila el estado de tu planta para prevenir el ataque del pulgón.
AMARILIS (HIPPESASTRUM)
Esta es una planta bulbosa de origen tropical que florecerá a finales de primavera con un porte muy elegante. Los tallos de flor de esta planta son gruesos y en su coronación surgen tres o cuatro flores en forma de trompeta. Las más habituales son rojas pero también podemos encontrarlas en blanco y rosa, entre otros tonos. Cuando la planta está en flor podemos ubicarla en cualquier rincón de la casa, pero si la ubicas en un lugar fresco, la floración durará más tiempo. Mientras dure la flor, asegúrate de mantener la tierra húmeda. Ten cuidado con los ácaros, pulgones y cochinilla.
GUZMANIA (GUZMANIA)
De origen tropical, pertenece a la familia de las bromelias y es una planta epifita, es decir vive sobre las raíces de otras pero sin tomar de ellas nutrientes. Sus hojas, verdes y alargadas, forman una roseta en cuyo centro nacen unas brácteas de color verde en forma de espiga que se va tornando roja con el tiempo. No es la flor, si no, como hemos indicado, las brácteas de la planta. La flor, diminuta, nace en el centro de la roseta y dura alrededor dos días.Cuando esta muere poco a poco comienza a marchitar la planta. Los colores intensos de la guzmania la convierten en una opción muy popular para decorar nuestros hogares. Si apuestas por ella ten en cuenta que necesita crecer en una atmósfera muy húmeda y en un lugar bien iluminado y cálido (aunque le perjudica la luz directa). En verano el riego debe ser frecuente, con agua tibia y no caliza, y debes abonar la planta cada quince días desde marzo hasta agosto. Los enemigos principales de esta planta son los pulgones.
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