Los árboles frutales son una de las mejores incorporaciones que puedes hacer en tu jardín. Año a año verás crecer tu árbol, tendrás la oportunidad de cuidarlo para ayudarle a desarrollarse y disfrutarás con sus flores y, sobre todo, con sus frutos.
Los árboles frutales son todos los árboles capaces de producir frutas para el consumo humano. Dentro de este tipo de planta se engloban tanto los árboles de frutas carnosas como las manzanas, las peras o el membrilo; como los de frutos secos.
Tipos de árboles frutales
Hay diversas clasificaciones de los árboles frutales, pero la más común es la que los diferencia en función al fruto y la localización de la semilla del mismo.
Árboles frutales cuyo fruto posee un hueso interior.
Estos árboles producen frutos carnosos a los que llamamos “drupa”. Las semillas se encuentran en el interior del hueso, llamado también “carozo”.
Un ejemplo de este tipo de árboles sería el ciruelo, el olivo o el albaricoquero.
Árboles frutales cuyo fruto posee pepitas internas.
Sus frutos carnosos se denominan “pomo” y en ellos podemos ver claramente sus semillas, que se encuentran en el interior de un “endocarpio coriáceo”, que es la capa que rodea a las semillas, una capa blanda.
Un ejemplo de este tipo de frutales sería el peral, el manzano o el membrillero.
Árboles frutales de frutos secos.
La diferencia, en este caso, no está solo en la semilla si no también en la textura del fruto, que no tiene pulpa ni es carnoso, si no que es duro y seco. Además, están encerrados en una especie de cápsula o cáscara.
Un ejemplo de este tipo de árbol frutal sería el nogal, el castaño o el avellano.
Árboles frutales exóticos.
La estructura de los frutos de estos árboles es muy variada, aquí se englobarían aquellos que no encajan en otros tipos.
Un ejemplo de este tipo de árbol sería la higuera, el papayo o los cítricos.
Cuidados generales de los árboles frutales
Antes de plantar un árbol frutal en nuestro jardín debemos conocer sus necesidades para saber si es apto o no para nuestro clima y qué cuidados específicos requiere. A modo general, todos los frutales necesitan:
- SOL: La mayoría de los árboles frutales necesitan al menos seis horas de pleno sol en la temporada de crecimiento.
- ESPACIO: Tenemos que tener en cuenta que las raíces de estos árboles se extienden bastante más allá que la copa, por lo que se recomienda plantarlos al menos a un metro de aceras y bordes y a unos dos metros de las casas o construcciones. Además, el espacio entre árboles debe ser de dos metros como mínimo.
- RIEGO: Recién plantados estos árboles requieren un riego abundante y periódico. Una vez que el árbol crece y se extienden sus raíces podemos espaciar los riegos.
- ABONO: El abono es una de las tareas más importantes en el cuidado de nuestros frutales. Los fertilizantes deben agregarse desde el momento mismo de la plantación (abono de fondo) y cada año durante toda la vida del árbol (abono de mantenimiento).
Calendario de los cuidados de los frutales
Seguro que te sabes bien el calendario de floración y de producción del fruto de los frutales, ¿pero estás al tanto de cuándo hay que hacer las tareas más importantes en sus cuidados?
Cuándo plantar los frutales: lo ideal es hacerlo durante el invierno, cuando la planta está en reposo, y así no se verá afectado el desarrollo de la planta.
+ info: Es el momento de plantar frutales en tu jardín
Poda de los frutales: esta tarea es fundamental en el crecimiento de nuestro árbol. La poda se realiza a finales del invierno. Diferenciamos cuatro tipo de podas:
- Poda de formación: durante los cuatro primeros años de vida, para dar la forma adecuada al árbol.
- Poda de limpieza: se hace todos los años para eliminar las ramas secas y las partes del árbol que no están saludables.
- Poda de fructificación: se hace también todos los años y sirve para la renovación del árbol y prepararlo para la cosecha del año siguiente.
- Poda de regeneración: en este caso es útil solo en aquellos casos que queremos recuperar un árbol que parece a punto de morir.
Tratamientos preventivos de los frutales: en invierno debemos de aplicar una serie de tratamientos a nuestros árboles frutales para proteger el árbol de la entrada de bacterias y hongos por las pequeñas heridas que dejan las hojas al caer; y reducir las plagas y hongos que pasan el invierno en cualquier rincón protegido de tronco, ramas o yemas. Con todo ello, conseguiremos que el árbol crezca con salud y obtener una mayor producción de fruta.
[…] [Artículo] Aprende sobre los tipos de frutales y los cuidados de los árboles frutales […]