El verano es época de balcones y terrazas. También es un momento en el que pasamos menos tiempo en casa, hay más horas de sol, el calor aprieta y estamos planificando las vacaciones. Por todo ello, si vives en una zona con un clima cálido, tienes que buscar plantas que sobrevivan bien a todas estas circunstancias.  

Hoy hablamos de plantas de temporada a las que les gusta el calor… ¡más que a ti! 

Petunias: plantas que toleran el calor

Plantas para el calor: hablemos del riego

¡Ojo! Que les guste el calor no quiere decir que no necesiten agua. En verano muchas de plantas están en época de floración, por lo que están en plena actividad y demandan más cuidados que nunca. Todas las plantas necesitan una pauta de riego regular. Y, por supuesto, cuando las temperaturas suben por encima de lo normal, habrá que extremar los cuidados y aportar más agua de lo normal para ayudarles a sobrellevar el calor. Como nosotros, vamos. 

«Ya, pero es que en verano me voy de vacaciones y entonces… ¿cómo riego?». Deja de lado las excusas. Sobre el riego en vacaciones puedes echar un vistazo a estos contenidos:

Como norma general, te traemos dos prohibiciones para tu riego este verano:

  • No riegues las hojas o las flores, ya que el sol puede provocar un efecto lupa que queme las flores y las hojas. 
  • No inundes los platos que dejas bajo las macetas. El agua estancada y caliente favorece la creación de un ecosistema perfecto para los mosquitos… 

Plantas que toleran muy bien el calor

Geranio

Riego un par de veces por semana

Es tan sencilla de mantener y tan agradecida en su floración que es ideal hasta para las personas más novatas en el cuidado de plantas. Riégala dos veces por semana durante la primavera y cuando suban las temperaturas aumenta la pauta a tres veces por semana. Lo más importante es que te fijes siempre en que el sustrato esté ligeramente húmedo. Y dale sol, mucho sol…

Plantas colgantes para tu balcón: geranios

Lavanda

Riego una vez por semana

Un clásico del verano. Traslada a tu balcón un trocito de esos campos de lavanda que tan bien lucen en las redes sociales. Puedes plantar la lavanda en maceta (escoge una con un diámetro de entre 30 y 40 centímetros) y colócala a pleno sol. Buenas noticias: la lavanda no es exigente en cuanto al agua. En los meses de calor riégala una vez por semana (siempre que te asegures de que el sustrato está seco).

Lavanda

Dalia

Riego dos o tres veces por semana

Esta espectacular flor es una de las mejores opciones para presumir de terraza o balcón este verano. Las flores de la dalia son bastante grandes y de colores intensos y llamativos. La dalia necesita solo dos cosas: mucha luz y agua. Durante el crecimiento y la floración de tu dalia, riégala unas dos o tres veces por semana, siempre sin encharcar la planta.

Dalia

Buganvilla 

Riego un par de veces por semana

La buganvilla es la dama del verano y queremos romper el mito de que es una planta delicada. Lo más importante que debes saber es que la planta necesita mucha luz, toda la que sea posible, para que la planta luzca a tope de color. Y, apunta, no es especialmente exigente con el riego: en verano bastará con un riego semanal si está plantada directamente en el suelo y un par de riegos semanales si está en maceta.

Buganvilla

Petunia 

Riego diario

Otro clásico de los balcones por su fácil cultivo y por la cantidad de flores que te regalará durante la primavera y el verano. Puedes elegirla en diferentes colores, con bordes lisos u ondulados… Lo único que debes tener en cuenta para cuidarla es que la petunia necesita mucho sol y un riego frecuente y abundante. En verano, de hecho, el riego debe ser diario. 

Petunias

Gazania 

Riego tres veces por semana 

La flor de la gazania tiene un gran parecido a las de las margaritas pero su tamaño es mayor. Es una planta muy rústica que adora el sol: si la situamos a la sombra las flores permanecerán cerradas. Es una planta de gran resistencia, poco exigente y con flores casi todo el año. El riego debe ser frecuente en primavera y en verano. 

Gazania

Surfinia 

Riego diario

Una de las plantas colgantes más populares del verano: la surfinia. Fácilmente reconocible por su colorido y sus flores en forma de campaña, las encontrarás en muchos balcones de tu entorno. El riego debe ser constante: en primavera cada dos días y en verano a diario. Y, sobre todo, dale sol, mucho sol. Cuanto mayor sea su exposición a la luz, mejor crecerá y más florecerá.

Plantas colgantes para el balcón: surfinia

Glicinia 

Riego dos veces por semana 

Esta espectacular planta trepadora no necesita mucha presentación. Su nombre científico es Wisteria, aunque también es conocida como flor de la pluma. La glicinia es una planta resistente y de crecimiento rápido, especialmente a partir de su segundo año de plantación. Sus flores, de color violeta o malva, aparecen agrupadas en grandes racimos a finales de la primavera. Soporta temperaturas extremas, tanto cálidas como frías, y necesita un riego regular. 

Jazmín 

Riego diario

El jazmín es una planta propia de climas cálidos que necesita luz solar buena parte del día para aumentar así la floración. Es muy importante regarla de manera regular, sobre todo durante la primavera y el verano. De hecho, en verano no es descabellado regar esta planta más de dos veces al día. En invierno, en cambio, recomendamos que lo riegues solo cuando notes que la tierra ha empezado a secarse.

Jazmín

Alegría guineana

Riego diario

Si quieres tener un balcón lleno de color, esta es una de las mejores opciones. Es una planta anual que tiene unos cuidados similares a sus hermanas, las populares alegrías de la casa. Y, como ellas, nos regalarán flores desde la primavera y durante todo el verano. Los riegos han de ser abundantes y nunca dejaremos que el sustrato llegue a secarse del todo. Es recomendable colocar platos en la base de los tiestos y asegurarse de que no falte agua en ellos.

Rosal

Riego dos veces por semana

La reina del jardín es también una planta muy resistente al sol y al calor. Si la planta está enraizada, bastaría con regarla un par de veces por semana. Eso sí, tan importante como no regar en exceso es no mojar las hojas del rosal, ya que la humedad puede provocar la aparición de problemas como el oidio, el mildiu, etc.